Tras el juicio del rapero Pablo Hasel por la mal llamada Justicia española, que ha quedado visto para sentencia con una previsible condena de de 2 años y 8 meses de cárcel y más de 40000 € de multa, el PCPV denuncia la “justicia a la carta” y la libertad burguesa que tan duramente se muestra contra las voces y personas antifascistas. Esto tiene un nombre, y es represión.
Ni es el primer juicio que sufre Pablo Hasel, sin haber cedido a las amenazas de las duras condenas, ni es el único rapero (ni antifascista) perseguido por una Justicia que tarda décadas en condenar a políticos corruptos, actúa de manera arbitraria defendiendo a la anacrónica y corrupta familia real, actuando con sorprendente rapidez ante la respuesta de la clase trabajadora por los flagrantes ataques represivos y de miedo sufridos. Entre ellos debemos destacar Alfon, los jóvenes de Altsasua, Andrés Bódalo, Nahuel, Aitor Cuervo, los diputados de Esquerra Republicana de Cataluña, los Jordis y tantos otros que no se conocen tanto pero se les priva de su libertad.
En un país donde se crea una Ley Mordaza para castigar la movilización social, formando parte de todo un paquete represivo que incluye entre otras cuestiones una modificación penal para incluir una “cadena perpetua revisable”, donde se prefiere la amnistía fiscal a la amnistía de los y las presas políticas, donde la Corona española está por encima de la ley, donde se tolera la desaparición de discos duros de pruebas judiciales, la quema de salas judiciales con numerosa documentación, el chantaje a los jueces, donde se incumplen cláusulas de referéndum, donde se protege al empresario corrupto mientras se siguen permitiendo desahucios abusivos por parte de la banca a la que tanto dinero se le regala desde las arcas públicas, en un país donde un mensaje en redes sociales te puede llevar a la cárcel pero estafar millones de euros a los contribuyentes te permite ni pisarla, en un país donde tu libertad de expresión termina donde empieza el poder de algún intocable, ya sea un político con influencias, un empresario con poder, una institución criminal, o un juez corrupto.
Mientras tanto la población pagamos sus abusos, sus desfalcos, sus recortes, sus medidas capitalistas, sus insultos, sus favores, su desprecio a la dignidad humana, su corrupción y su irresponsabilidad. En conclusión, su política del miedo.
Pero vivimos bajo el concepto de libertad burguesa, bajo una Justicia Española diseñada por los herederos del franquismo, bajo unas reglas de juego marcadas por el gran capital, bajo un Estado cada vez más policial.
Nuestro apoyo y solidaridad a tantas voces que se mantienen firmes sin retractarse de su expresión libre contra las injusticias que nos oprimen.
Nuestro referente comunista siempre será la determinación de la lucha por los derechos y libertades de los pueblos.
Llamamos a la población a romper toda relación con el viejo régimen del 78 corrupto y viciado de nacimiento. Nuestro objetivo siempre será una República socialista, justa, igualitaria, próspera, honrada, democrática y libre. Y denunciar la práctica de sus políticas represivas y del miedo que atentan contra nuestros Derechos más fundamentales.
Valencia, 3 de febrero de 2018
Comité Central del PCPV